Calor y desgaste del neumático

– ¿Influye el calor en el desgaste del neumnático?

– ¿Cómo influye el calor en los neumáticos?

– Consejos para que el calor no afecte a tus neumáticos.

– ¿Cómo hago que el calor afecte menos en mi vehículo?

– ¿Cuándo cambiar los neumáticos si se han desgastado por el Sol?

– Conclusión

– Datos importantes

¿INFLUYE EL CALOR EN EL DESGASTE DEL NEUMÁTICO?

Cuando suben las temperaturas, no solo nosotros buscamos sombra y aire acondicionado: nuestros coches también sufren el calor, especialmente los neumáticos. Aunque están diseñados para resistir condiciones extremas, el verano puede suponer un reto importante para su rendimiento y durabilidad. Pero ¿cómo afecta realmente el calor al desgaste de los neumáticos? ¿Qué podemos hacer para minimizar estos efectos?

En este artículo te lo explicamos todo. Primero, conocerás cómo influye el calor en la presión y la fricción de los neumáticos. Después, te daremos consejos útiles para cuidarlos en verano y sabrás cuándo es el momento adecuado para cambiarlos. Si te interesa la seguridad vial y el mantenimiento de tu vehículo, esta guía es para ti.

¿CÓMO INFLUYE EL CALOR EN LOS NEUMÁTICOS?

Consecuencias del calor en tus neumáticos

Los neumáticos están fabricados principalmente con caucho y compuestos que reaccionan a la temperatura. En condiciones de calor extremo, estos materiales pueden comportarse de forma diferente a como lo harían en climas templados o fríos. El verano, con sus temperaturas elevadas y largos trayectos por carreteras calientes, puede generar un entorno especialmente exigente para las ruedas.

AUMENTO DE LA PRESIÓN DEL NEUMÁTICO

Cuando el aire se calienta, se expande. Esta ley física básica también se aplica dentro de tus neumáticos. En verano, es habitual que la presión del neumático aumente notablemente. Esto se debe al calor acumulado en el aire y al generado durante la conducción.

Por cada 10 °C que aumenta la temperatura, la presión de inflado puede subir de 0,1 a 0,2 bares. Si no se controla, este exceso de presión puede provocar:

  • Menor superficie de contacto con la carretera.
  • Desgaste irregular en el centro del neumático.
  • Mayor riesgo de reventón si el neumático ya presenta algún daño.

Por ello es esencial revisar la presión con regularidad, preferiblemente cuando los neumáticos estén fríos.

MAYOR FRICCIÓN DEL NEUMÁTICO

El asfalto caliente incrementa la fricción entre la superficie de la carretera y los neumáticos. Este calor generado por la fricción no sólo acelera el desgaste, sino que también puede afectar a la maniobrabilidad del vehículo.

Cuando un neumático se calienta en exceso, sus materiales pueden perder propiedades elásticas. Como resultado, el agarre se reduce, sobre todo en frenadas o giros. Además, si realizas muchos viajes largos durante el verano o conduces con estilo deportivo, el efecto de la fricción es aún mayor.

DEGRADACIÓN DE LA GOMA DEL NEUMÁTICO

El calor actúa como un acelerador del envejecimiento del caucho. A temperaturas elevadas, los aceites y resinas que mantienen flexible el neumático empiezan a evaporarse o degradarse. Como consecuencia, la goma se vuelve más seca y quebradiza.

Este desgaste no siempre es visible de inmediato, pero con el tiempo puede comprometer la estructura interna del neumático, haciéndolo menos seguro. En climas muy cálidos, la vida útil del neumático puede reducirse significativamente si no se toman precauciones.

CONSEJOS PARA QUE EL CALOR NO AFECTE A TUS NEUMÁTICOS

Cuida los neumáticos en verano

Afortunadamente, hay muchas formas de proteger tus neumáticos del calor sin complicarte demasiado. Lo importante es mantener una rutina de mantenimiento regular y prestar atención a ciertos detalles clave durante los meses más calurosos.

El verano exige una atención especial a todos los componentes del coche, y los neumáticos no son la excepción. A continuación, te damos los consejos más prácticos para alargar su vida útil.

REVISAR LA PRESIÓN DE LOS NEUMÁTICOS

No te limites a revisar la presión solo antes de las vacaciones. Hazlo cada dos o tres semanas en verano, y siempre antes de un viaje largo. Utiliza un manómetro fiable o acude a una estación de servicio donde puedas controlar la presión en frío.

Además, no olvides que la presión recomendada varía según la carga del vehículo. Si viajas con la familia, maletas y una bicicleta en el techo, ajusta la presión según las especificaciones del fabricante.

REALIZAR ALINEACIONES PERIÓDICAS DE TUS NEUMÁTICOS

Un vehículo mal alineado desgasta los neumáticos con mayor rapidez. Además, puede aumentar el consumo de combustible y afectar al comportamiento en carretera.
Haz una alineación al menos una vez al año o cada 15.000 km, o si notas síntomas como:

  • Dirección que se desvía hacia un lado.
  • Volante torcido cuando el coche va recto.
  • Vibraciones al conducir a alta velocidad.

REVISA TUS NEUMÁITCOS

Observa no solo la banda de rodadura, sino también los laterales. Busca signos de:

  • Grietas o fisuras.
  • Abultamientos o deformaciones.
  • Desgaste irregular entre los cuatro neumáticos.
    Además, verifica que la profundidad del dibujo sea adecuada. Un neumático liso pierde agarre y es especialmente peligroso en condiciones húmedas, algo más frecuente de lo que parece incluso en verano.

¿CÓMO HAGO QUE EL CALOR AFECTE MENOS EN MI VEHÍCULO?

Tips para cuidar tus neumáticos con calor

Además del mantenimiento, la forma en que conduces influye en la salud de los neumáticos. El trato diario al coche también afecta durante el calor.

Estos consejos pueden parecer simples, pero marcan una gran diferencia si se aplican con constancia.

EVITA LA SOBRECARGA DEL VEHÍCULO

Sobrecargar el coche no solo aumenta el consumo de combustible, sino que ejerce una presión innecesaria sobre los neumáticos. A mayor peso, más fricción, más temperatura y más desgaste. Consulta el manual del coche para conocer el peso máximo permitido y distribuir bien la carga para evitar puntos de presión.

NO APARQUES TU VEHÍCULO AL SOL

El asfalto puede alcanzar más de 60 °C en días calurosos. Estacionar bajo el sol directo hace que la temperatura del neumático suba incluso cuando el coche está parado, acelerando su envejecimiento.

Siempre que puedas, aparca en sombra o en un garaje. Si el coche va a estar mucho tiempo expuesto, usa una funda protectora para las ruedas.

CONDUCE SUAVE Y CONSCIENTEMENTE TU COCHE

Una conducción agresiva genera más fricción, eleva la temperatura del neumático y reduce su vida útil. Intenta:

  • Evitar frenazos bruscos.
  • No tomar curvas cerradas a alta velocidad.
  • Acelerar de forma progresiva.
    Además de ahorrar neumáticos, ahorrarás combustible y reducirás el desgaste general del coche.
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¿CUÁNDO CAMBIAR LOS NEUMÁTICOS SI SE HAN DESGASTADO
POR EL SOL?

¡Cambia tus neumáticos conscientemente!

Saber cuándo ha llegado el momento de cambiar los neumáticos es fundamental para la seguridad vial. El calor puede acelerar este proceso, por lo que es vital estar atentos a ciertos indicadores.

Un neumático en mal estado es una bomba de relojería. Aunque no haya pinchazos visibles, el calor puede haber causado un daño estructural difícil de detectar sin una revisión técnica.

ATENTO A LA BANDA DE RODADURA

La banda de rodadura es el principal indicador del desgaste. Si notas:

  • Que el dibujo está casi liso.
  • Desgaste desigual (más por un lado que por otro).
  • Que el coche pierde adherencia en curvas o al frenar.
    Es momento de cambiar. Puedes usar el truco de la moneda: colócala en el dibujo del neumático y observa cuánto se hunde. Como alternativa, utiliza un profundímetro para medir.

CAMBIA TU NEUMÁTICO CADA 5 AÑOS

Incluso si el dibujo parece en buen estado, el calor y el paso del tiempo degradan la goma. Revisa la fecha de fabricación en el lateral del neumático (los últimos cuatro dígitos del código DOT indican la semana y el año). Si tus neumáticos tienen más de cinco años, haz que los revise un profesional cada seis meses.

Y si superan los diez años, cámbialos sin excusas, aunque parezcan nuevos. La seguridad no se negocia.

CONCLUSIÓN:

El calor no solo nos afecta a nosotros: también pone a prueba a nuestros vehículos, especialmente a los neumáticos. Las altas temperaturas pueden provocar varios efectos negativos en los neumáticos. Desde el aumento de la presión hasta la degradación del caucho, aceleran el desgaste y afectan a la seguridad.

Pero no todo está perdido. Con revisiones regulares, una conducción responsable y algunos cuidados básicos, puedes mantener tus neumáticos en buen estado durante todo el verano y más allá. Recuerda que los neumáticos son tu contacto con el asfalto: si ellos están bien, tú también lo estarás.

¿La clave? Prevenir antes que lamentar. Cuida tus neumáticos y tu coche te lo agradecerá con mejores trayectos, menor consumo y, sobre todo, mayor seguridad.

DATOS IMPORTANTES

Efecto del calor

Aumenta presión, fricción y degrada la goma del neumático

Presión ideal

Revisar en frío; ajustar según carga del vehículo

Desgaste más común

Banda central y laterales; atención a grietas y bultos

Frecuencia
de revisión

Cada 2-3 semanas en verano o antes de viajes largos

Conducción recomendada

Suave, sin acelerones ni frenadas bruscas

Consejo de aparcamiento

Siempre que sea posible, en sombra o garaje

Herramientas útiles

Manómetro, profundímetro, truco de la moneda

Vida útil del neumático

Revisión a los 5 años; cambio obligatorio a los 10 años
Sara MWP
Author: Sara MWP